RESEÑA DE "CUANDO CONSIGAS...HABLARME" DE BEA MELWORREN




TÍTULO: CUANDO CONSIGAS HABLARME
AUTOR: BEA MELWORREN
GÉNERO: ROMÁNTICO
PUNTO DE VENTA: AMAZON
PRECIO:2,99

SINOPSIS:

Catherine Miller vuelve al pueblo que la vio nacer y que, muy a su pesar, no dejará de hacer conjeturas sobre su temprana maternidad.
En esta nueva vida se reencontrará con viejos amigos y se tendrá que enfrentar a la familia Bowen, además de a quien decidido poner su mundo patas arriba: Nathan.

Un hombre con un pasado tan difícil que le hizo alejarse de sus seres queridos y centrarse solo en su trabajo, pero que se niega a dejarla escapar. Dispuesto a derribar sus barreras, aunque tenga que mentir ocultándole su identidad.

Hay mucho que les une y solo una cosa que los separa: el orgullo de ambos.
¿Serán capaces de superarlo?
¿Podrán iniciar, juntos, una nueva vida?
¿O las mentiras, con las que se escudan, acabarán por destruirles?






MI OPINIÓN PERSONAL:

Podemos decir que Cuando consigas…hablarme   es la ópera prima de Bea Melworren, a pesar de haber publicado con anterioridad María. La perdición de Nathan Bowen, un relato breve que nos abre las puertas a esta historia a la vez que nos presenta a algunos de los personajes que saldrán en la misma, como es el caso de Nathan  o de la propia María.
Cuando consigas…hablarme no es una historia de amor al uso, es sencillamente algo más…, mucho más.  Amor, desamor, intriga, suspense, misterio, celos, traición… Pasión, orgullo, sed de venganza, terquedad, cabezonería… son los ingrediente principales con los que juega la autora para crear una trama absolutamente fresca, distinta, original.  Una trama que poco a poco va envolviendo al lector, absorbiéndolo, creando en él mil y un sentimientos, opiniones, reacciones o puntos de vista. Obligándolo a posicionarse junto a tal o cual personaje para al  minuto siguiente cambiar enteramente de opinión.
Con historias secundarias, dentro de la trama principal, con unos giros inesperados tan tremendos que deja al lector con la boca abierta, con una buena dosis de misterio, suspense, acción e intriga. Llena de mentiras, secretos, verdades a medias, cosas no dichas y en donde el amor, no solo el de pareja, es el protagonista indiscutible de la misma.  Cuando consigas… hablarme se ha convertido en una de mis historias favoritas y espero que pronto lo sea también de muchas de vosotras. No en vano se ha posicionado desde su publicación entre los primeros puestos en Romántica y en General.
Sus personajes se mueven por sí mismos, es imposible predecir por dónde van a salir; están cargados de un realismo asombroso, una humanidad tremenda y una carga emocional tan profunda que está marcando todos y cada uno de los momentos de sus vidas, además de hacerlos tremendamente débiles. Es esta misma debilidad la que los hace totalmente humanos, forzándolos a cometer todos los errores y equivocaciones que solo un ser humano puede llegar a cometer. Pero esa misma debilidad, cuando la asumen, los lleva a tener la fuerza necesaria para seguir adelante, para pasar página… Para avanzar… o al menos en apariencia…, aunque por lo menos lo intentan, ¿lo conseguirán?
 Nathan y Cat son personajes tan iguales y a la vez tan distintos… que se complementan, llegando a ser imposible concebir un futuro en donde no esté el uno con el otro. El problema radica en que ellos lo vean así, o decidan seguir por otro camino diferente, separando sus vidas para siempre. ¿Qué senda elegirán?
Tanto los tres protagonistas principales de la historia como algunos de los secundarios, o no tan secundarios, que confluyen en la misma tienen su propio pasado, su propia historia que contar. Un pasado que los marca de tal manera que les impide seguir adelante o aceptar lo obvio, e incluso lo necesario. Un pasado que, de un modo o de otro, les impide avanzar, ser objetivos e interactuar con la persona que tienen al lado, comprenderla; entender por qué en un momento determinado actúa de cual o tal manera, ponerse en sus propios zapatos, en su piel, empatizar con sus sentimientos, emociones… y decisiones quizás erróneas, quizás producto de la situación que atraviesa.  Nuestros dos protagonistas más principales se ocultan secretos; secretos que pueden dar al traste con todo aquello que han conseguido en la vida, lo que acaban de conseguir o pudieran conseguir en un futuro, porque con secretos o mentiras… no se puede avanzar. 
También podemos hablar de miedo, un miedo que los puede llevar incluso a mentir o a ocultar una información importante; un miedo atroz a lo que puede o no ocurrir si actúan de una manera en concreto o confiesan abiertamente su secreto a ciertos personajes en un determinado momento. Miedo al qué pasará, a qué sucederá si yo hago esto… Miedo a…volver a perder. 





Pero vayamos viéndolos poco a poco y analizando a cada uno de ellos.
Voy a empezar por Nathan Bowen. Nathan es un personaje complicado a lo sumo. Dicen que por la boca muere el pez y esto es lo que le sucede a este hombre en la mayoría de las ocasiones, pues es muy celoso y tremendamente orgulloso. Tanto es así, que muchas veces acaba siendo víctima él mismo de ese orgullo indomable. Se ofusca de tal manera que no es consciente del daño que se puede hacer a él mismo o a los demás, sobre todo a Cat. Hay un momento, sobre todo, en la historia en que, totalmente abatido por los acontecimientos hace algo… estúpido, quizás también influenciado por las opiniones de terceras personas, pues al mismo tiempo es un personaje tremendamente maleable en ocasiones.
  Es este orgullo tan férreo lo que le impide reconocer las cosas a tiempo, el que  no le deja dar su brazo a torcer, el  que no le permite recular cuando todavía es momento de hacerlo,  el que le deja darse cuenta de su error, pero le impide al mismo tiempo rectificar. En resumidas cuentas, un sentimiento tan fuerte que puede que cuando por fin se rompa ese muro que crea a su alrededor, sea demasiado tarde para enmendar las cosas mal hechas… ¿O puede que no?
 Realmente ambos son igual de orgullosos  y es debido a esto que en algunos momentos del libro hay un choque de voluntades tan tremendo que uno se pregunta si no sería mejor que cada uno escogiese su propio camino. Son momentos únicos,  tratados por la autora de una manera tan  magistral que una los lee conteniendo la respiración, preguntándose cómo terminará la cosa. Lo cierto, y lo que se acaba intuyendo a medida que avanza la historia, es que ambos tienen miedo, como he señalado más arriba, y se escudan en ese orgullo tan impenetrable para suplir esa debilidad.
Nathan Bowen es, al mismo tiempo, un hombre tremendamente roto, condicionado por un pasado tan…complicado, tan difícil de imaginar, tan tremendo que se ha cerrado a sí mismo y a la posibilidad de ser feliz algún día. Alejado de todo lo que un día amó se ha refugiado en la seguridad de algo que no es bueno para él, sino completamente tóxico para su persona.
Ha huido de la realidad, de sus raíces…, de todo lo que alguna vez significó algo para él. Ese pasado condiciona de tal modo su presente que en algunos momentos de la historia, debido a su comportamiento o a su forma de reaccionar ante diversas situaciones, se puede llegar a mascar su desesperación, su dolor, su rechazo hacia sí mismo o hacia lo que ha hecho. Es toda una amalgama de sentimientos tan encontrados que le es difícil digerirlos, analizarlos con objetividad… y superarlos. En este sentido tengo que felicitar a la autora por su manera tan rotunda de tratar a este personaje tan complicado y difícil, porque me ha gustado mucho la forma en la que poco a poco va  introduciendo frases en  las cuales se ve su dolor, los sentimientos encontrados… Su desesperación. Hay momentos duros, casi rozando la crueldad, protagonizados por este personaje que despierta en el lector todo tipo de reacciones ante los hechos que se suceden y ante su manera de proceder.
Si queremos encontrar en Nathan el héroe al que todas estamos acostumbradas últimamente: guapo, millonario, encantador, con un pasado que lo convierte a veces en villano y, sobre todo, el típico protagonista perfecto…, no lo vamos a encontrar. Es guapo, es encantador, es dominante, tiene dinero, le gusta controlar todo y a todos…, pero no es para nada el típico protagonista masculino al que estamos acostumbradas o que ahora parece estar de moda. Es un ser real, con sentimientos y actitudes reales, por lo que  a veces su modo de comportarse y actuar no se comprenda o no se entienda en absoluto, porque como todo ser humano que se precie no se comprende a veces ni él mismo. Y, desde luego, no es un hombre perfecto, es un hombre   con una carga de sufrimiento atroz.  Pero no se escuda en ese pasado   para dañar o para justificar su comportamiento, aunque a veces también tiene su punto.
Nada más ver a Cat sabe que esa mujer es para él, que ella y solo ella puede sacarlo de su desdicha, y se propone conseguirla  sin importarle nada más, del modo que sea, al precio que sea, llegando incluso a recurrir a la mentira y el engaño para conseguir su objetivo. El problema está en que quizás Cat no pueda sacarlo de esa desdicha, de esa desidia, porque ella misma también necesita que la rescaten. Cat tiene un secreto, algo que los afecta a ambos, secreto por el cual ella también recurre al engaño que encierra ocultarle algo a alguien.  El entorno que rodea a la pareja, más bien las personas que conforman ese entorno, y el problema que los une y a la vez desune es… importante, pues son en alguna ocasión el detonante de sus decisiones o comportamientos.
Como he dicho antes, muchas veces no se entiende la manera de actuar de Nathan, aunque más adelante él mismo lo explica, queda esa comezón, ese sentimiento frustrante de que no acabas de verlo, hasta que llegas a la conclusión de que realmente no se entiende ni él mismo en su proceder de tal o cual momento. Pero a medida que nos vamos adentrando en la historia y acercándonos a su desenlace final… quizás lo vayamos comprendiendo un poquito más, aunque no por eso aprobemos su forma de proceder, ¿o quizás esto no sea así? ¿Quizás encontremos en él a un chico enamorado e ilusionado cuyo futuro perfectamente planeado se rompió en pedazos en un momento determinado, dejándole una cicatriz tan grande que le ha sido imposible cerrarla? O muy lejos de eso… ¿Quizás solo encontremos a un hombre empeñado en ejecutar su venganza y cegado a cualquier otra cosa? ¿Qué fue aquello tan horrible que le pasó entre el pequeño relato de María y esta gran historia?
En resumidas cuentas, Nathan es el héroe romántico sobre el que a mí me gusta leer, pero no es perfecto, es un ser humano que sufre, ama, llora y sobre todo se equivoca…, igual que todos lo hacemos. Un hombre que quizás se deje llevar en un momento dado por lo que opinen o no opinen los demás. O por sus propios sentimientos y emociones. Es un hombre de prontos, alguien que soñaba con una vida perfecta hasta que esos sueños se rompieron en pedazos. Un hombre orgulloso, herido y roto al que poco a poco van recomponiendo Cat y Carlie sin ellas mismas darse cuenta, del mismo modo que él lo hace con ambas.
Por último, quisiera hablar del tremendo problema que tiene ya no solo con ese orgullo del que he estado hablando, sino con un monstruo que cuando aparece es capaz de acabar con la relación más estable que se pueda llegar a conocer. Me refiero a los celos, unos celos que a veces no le dejan ver más allá de sus narices, unos celos a veces justificados y otras no tanto. Unos celos que le hacen variar incluso de opinión o de actitud, de apartarlo del camino marcado. Algo que los separa en momentos en los cuales quizás deberían intentar entenderse, pero con una persona poseída por ese infame monstruo no es posible. Pero también he de decir que en este libro hay una excepción que confirma la regla y es el hecho de que, por celos, Nathan quizás sea capaz de derribar la muralla que ha erigido a su alrededor ese orgullo tan férreo que tiene, y se decida por fin a actuar como tiene que actuar, ¿o puede que no? ¿Puede que haya una persona a su lado que le conoce lo suficiente como para activar este monstruo en su propio beneficio.







Vamos con Cat. Cat es una asistente social cuyo trabajo la está poniendo en contacto continuamente con toda una serie de situaciones y momentos trágicos con los cuales ella empatiza, porque es una mujer con una enorme empatía, no olvidemos cuál es el trabajo de una asistente social y todas las cosas tristes, dramáticas y horribles que tiene que ver a lo largo del día. Cat, a veces, hace suyos esos problemas, esas situaciones, esos dramas; sobre todo uno en particular para el que busca una solución, solución que nos lleva al inicio de la trama.
 Cat es una mujer muy rota debido a dos incidentes de su pasado demasiado dolorosos incluso traumáticos.   Pero a la vez es muy terca y orgullosa. Esta misma terquedad la lleva a no abandonar su propósito, la decisión que ha tomado, a pesar de que tiene más contras que pros. Una decisión que  le acarrea una serie de situaciones dramáticas y desgarradoras…, inusitadas e inesperadas; personas que no la entienden y se ponen en su contra, incluso  que quizás la abandonen a su suerte; personas que la critican o juzgan, aunque no sepan nada de ella y de su vida; personas que conforman ese entorno tóxico del que antes hablaba.  Pero también dan lugar a toda una serie de acontecimientos  en las que la propia Cat y Carlie, su pequeña hija, se pueden ver comprometidas. En las que el secreto que guardan puede ser desvelado, rompiendo a ambas en más pedazos todavía.
 Cat es una mujer terca, orgullosa, cabezota, desesperante a veces, y es ese mismo orgullo, esa cabezonería la que la hace avanzar, la que la obliga a mantener sus principios, a no salirse del camino elegido, pero al mismo tiempo es algo que le impide seguir adelante. Ella ha tomado una decisión y actúa en consecuencia, nunca se echa atrás, aunque por el camino surjan dudas e indecisiones. Cat está sola y cuando alguien decide acompañarla en esa dura senda que ha escogido, simplemente desconfía, quizás porque la actitud de esas personas no sea la más adecuada, o quizás porque la traición o la mentira estén presentes en algún momento de ese camino. Cat vive con miedo, tiene miedo; y el que la gente que la rodea, su entorno, esté lleno de secretos, mentiras y cosas no dichas, no la hace ningún bien… No les hace bien a nadie.
 A medida que avanzaba en la lectura de esta historia, he ido empatizando más con ella que con Nathan, he logrado ponerme en sus zapatos y entenderla, comprender por qué actúa de una manera o de otra, aunque a veces pueda o no estar de acuerdo con su proceder. Sin embargo, hay un momento en la historia en que, sencillamente, no la entiendo, pero eso, amigas mías, lo tendréis que ver por vosotras mismas.









Vamos ahora con un personaje carismático de la historia…, aunque al principio no lo parezca. Yo creo que es la protagonista indiscutible de todo este enredo, porque sin ella y sus circunstancias, sinceramente, creo que no habría libro. Cuando consigas… hablarme no es solo la historia de Nathan y Cat, sino también la de Carlie, la hija de Cat. Una pequeña niña con un pasado tremendo y un problema… muy particular, algo que deberéis averiguar al leer el libro y que se desvela nada más empezar el mismo. Es por eso que no voy a hablaros más de este personaje tan tierno como entrañable. Una niña que estoy segura de que dejará una profunda huella en vuestros corazones, como lo ha dejado en el mío. Una pequeña personita que puede tener, sin saberlo, la clave de todo…
Parémonos un momento a profundizar un poco más en ese entorno que rodea a la pareja, conformado por unos personajes que también tienen sus propias historias con las que lidiar y que, sin embargo, se permiten el lujo de meterse en la vida de nuestros protagonistas, basándose en el hecho de que son amigos, hermanos, padres…. Un entorno que juzga, critica, culpabiliza, a veces en silencio, a veces abiertamente. Un entorno que actúa por su cuenta, que decide por los demás, sin tener en consideración a la otra parte implicada…, pasando de ella como vulgarmente se dice. Un entorno que a veces miente, engaña…
Puede, como antes he señalado, que este entorno que rodea a la pareja no sea bueno para ninguno de los dos, que sea más bien tóxico porque las personas que conforman el mismo, aunque no actúen de mala fe, ejercen una influencia tan grande sobre ellos que no los dejan avanzar o tomar sus propias decisiones por sí mismos, sino que las toman condicionados por ellos. Para personas tan inseguras como nuestros protagonistas, una palabra o frase dicha en un momento de angustia, de dolor, de tensión… puede llegar a ser tan destructiva que te lleve a tomar un camino totalmente equivocado, y a veces ese acto que puede llamarse «de amor» lleva a la otra persona, también, a tomar decisiones equivocadas llevadas por el dolor de la perdida, de la traición o de la incomprensión.
Por otro lado, que aquellos que te rodean se inmiscuyan en la relación de la pareja dando valoraciones u opiniones de temas que solo les competen a ellos, no es una buena manera de  ayudar a esa persona que nuestros protagonistas secundarios, el entorno,  dice querer o apreciar. Hay momentos de la historia en que determinados personajes emiten opiniones crueles, que hieren de tal manera a nuestros protagonistas, condicionándolos de tal modo, abocándolos a tomar decisiones injustas, que posiblemente estos personajes tengan que asumir su parte de culpa en la decisión tomada o la actitud determinada.
Nuestros protagonistas son personas adultas capaces de hablar, actuar y ver por sí mismos, pero hay veces que lo hacen tan condicionados por ese entorno que, sinceramente, pienso que les perjudica. Porque los únicos que tienen derecho a opinar sobre ellos mismos son nuestra pareja protagonista. En este sentido adoro a la Cat del principio porque ha tomado una decisión y nada ni nadie podrá hacerla recapacitar o echarse para atrás. Sin embargo, a medida que transcurre la historia, y a pesar de encontrar en ella a la misma Cat decidida y valiente, también veo en momentos muy puntuales a una Cat que desespera, que se deja llevar demasiado; una Cat un poco cobarde, indecisa, sobre todo al final, donde toma una decisión que puede cambiar por completo el rumbo de su vida, la de Carlie y la de Nathan. ¿Cuál será esa decisión? ¿Conseguirá alguien convencerla de que recapacite, o seguirá adelante con ella?
Analicemos poco a poco a las personas que componen este entorno, empezando por Nathan. Junto a Nathan está su familia. Nathan tiene un padre, una madre, unos amigos y, sobre todo, una hermana con una especie de don extraño que solo averiguareis leyendo la historia. También a su lado está Ramsey, su mejor amigo, su hermano y asistente o ayudante en su trabajo. La voz de su conciencia, alguien que le dice lo que él no quiere escuchar, dándole así una excusa para deshacer los errores cometidos, o lo que ninguno de los demás se atreve a decirle. Ramsey es un hombre vulnerable, como ser humano que es, y puede que esa vulnerabilidad les de algún que otro sobresalto o provoque algún que otro giro inesperado en la historia. Pero también es un hombre que sabe rectificar, reconocer su error y actuar en consecuencia, consiguiendo que el orgullo de Nathan acabe metido en algún cajón de su mesa de trabajo…, al menos por el momento.
Como toda buena madre que se precie, Elise, a veces se mete en donde nadie la ha llamado, se inmiscuye demasiado en una vida que no es la suya y a la que pienso, y esto es personal, que no tiene derecho a alterar. Su proceder en un momento determinado… es, a mi modo de ver, muy cuestionable. Sin embargo, no es una mala mujer, es una madre preocupada por un hijo, un ser humano con todos los defectos y virtudes que esto conlleva. También es una mujer que sufre, como madre… sufre. Pero como madre también se mete demasiado donde nadie la ha llamado.
Vayamos con Alyssa, su hermana. Una mujer determinada a conseguir lo que quiere y lo que piensa que los demás necesitan, cueste lo que cueste. Es demasiado entrometida a veces, pero es también la única capaz de enfrentarse al orgullo de su hermano, diciéndole muchas verdades a la cara… ¿Conseguirá Alyssa hacerle reaccionar cuando se enfrenta de ese modo a él? Alyssa, al igual que Ramsey, es la voz de la conciencia de Nathan, alguien a quien nuestro protagonista quiere con locura, a la que respeta y por la que es capaz de… casi cualquier cosa; en resumidas cuentas, que tanto Alissa como Ramsey pueden llegar a convertirse en esas personas capaces de darle el empujón que necesita para seguir adelante, capaces de derribar su orgullo.
Junto a Alyssa esta Lawrence, su marido, una persona que descubriréis vosotras mismas, y cuya relación con Nathan pasa por diferentes etapas. Es un personaje que no sale mucho en la historia, pero cuando sale lo hace para cumplir un papel preferente y primordial. Nathan tiene un pequeño problema con él, un problema que el mismo Nat ha hecho grande por culpa de ese orgullo tan feroz, por su manía de no escuchar a nadie excepto a él mismo. Por una tonta convicción de que solo él tiene razón o de que las personas no pueden cambiar…, rectificar ¿Conseguirán estos dos personajes limar asperezas y llegar a ser aquellos que un día fueron?
De Patrick, el padre de Nathan, poco podemos decir, aparece casi nada en la historia, pero la autora nos deja ver a un personaje comprensivo, cariñoso, humano, que apoya y quiere a su familia por encima de todo.  Que comprende el proceder de su hijo aunque no le guste, que entiende a Elisse, a Alyssa, a Stella y Kellan, de los que hablaré acto seguido, incluso a Cat y al propio Nathan. Pero también es un hombre que no se muerde la lengua, alguien que intenta que Nat consiga ver una verdad para la cual no está preparado, para la que puede estar totalmente ciego.
Le toca el turno a Stella, la cuñada de Nathan.   Stella es otro de los personajes de esta historia sometidos a evolución dentro de la misma. Uno de los personajes que tiene sus propios demonios que lidiar y que actúa de manera equivocada en un par de ocasiones, pudiendo incluso hacer tambalear la relación tan estupenda que hay entre los dos hermanos: Nathan y Kellan; y, por supuesto, la relación que existe en ese momento entre Nathan y Cat. Un personaje que tiene que solucionar algo en la historia, ¿lo logrará?
Kellan es un hombre que aparece también poco en el libro,  pero del que se adivina una enorme empatía con su hermano, complicidad, compañerismo, protección, comprensión, de tal manera que hay un momento en  que se pone de parte de él enfrentándose… a quien haga falta.
Antes de seguir analizando personajes, he de decir que una característica muy importante y primordial de la familia Bowen es su unidad. Una familia bien avenida que se apoyan los unos en los otros, que se comprenden, que no se abandonan a su suerte. Todos están siempre ahí para apoyar, ayudar o celebrar… Este dato es importante quizás para comprender el dolor de una madre y también para enfocar desde otro punto de vista, para empatizar por decirlo de algún modo, con el proceder de Elisee.
También es digno de mencionar a Gideon, el jefe de seguridad de la familia Bowen y hombre de confianza de Nathan; alguien que jugará un importante papel en la historia. Un personaje que va apareciendo poco a poco, tímidamente, un secundario que juega su papel a la perfección y que formará parte de la misma trama en distintas ocasiones.
Y por último tenemos a Linda, un personaje que ya aparece en María…, y vuelve a reaparecer en Cuando Consigas… hablarme de una manera un tanto curiosa, para cumplir su papel y dejar, a lo mejor, una puerta abierta. Es interesante también ver la evolución de este personaje desde María a esta historia, y es algo que descubriréis vosotras al leer.





Vamos con el entorno de Cat. Voy a empezar por Tom, un detective privado con unos métodos muy cuestionables, en el que Cat se apoya cada vez que necesita una mano amiga en que sujetarse. Al igual que Alysa, podemos decir que Tom es algo así como la conciencia de Cat, quien la cuestiona cuando se precipita, equivoca o hace algo mal; quien le echa la bronca cuando considera que su manera de actuar… ha podido ser temeraria. Pero al mismo tiempo es un personaje complicado, cuyo proceder y manera de enfocar algunos momentos le hace ser en parte culpable de los sucesos posteriores. Es alguien que dice lo que piensa a la cara, sin meter filtros, sin mirar consecuencias, y las consecuencias de una palabra mal dicha o mal interpretada cuando influye de un modo letal en una persona puede ser… destructivo. Creo que Tom obra mal o se equivoca en algunos momentos de la historia, es un gran amigo de Cat, pero… lo que sí puedo decir es que hay muchas clases de amor y que todo lo que hace, o deja de hacer este personaje, lo hace por amor. Por amor a una Cat a la que considera como una hermana, una amiga, alguien a quien él se encarga de proteger.
Tom, al mismo tiempo, tiene su propia historia aparte, una historia de equivocaciones y mal proceder que puede que le esté pasando factura en su momento actual y, aunque él pretenda arreglarlo… ¿Cómo quedará su historia?, ¿se solucionará?, ¿quedará en un impasse?   ¿Será objeto de una secuela de Cuando consigas…hablarme?
Vayamos con Dereck, su hermano. Otro que tal baila. Aparece en un momento determinado, cuando quizás Cat más lo necesite; la ayuda, la cuida, la protege… Quiere a su hermana con locura, pero se pasa de protector y es posible que esta actitud no sea buena para una Cat que se empeña en volar por su cuenta. El primer encuentro entre Derek y Cat es digno de leerse, pero no de explicar aquí, claro está.  Hacia el final del libro su actitud se contradice a la que tenía al principio, algo muy normal en la manera de escribir de esta autora y un elemento que dota al personaje de realismo y humanidad, porque el ser humano es tanto o más contradictorio como nuestros personajes en cuestión.
No todos los personajes que conforman este entorno tienen que ser perjudiciales para la pareja. Este puede ser el caso de Gina, la niñera de Carlie, alguien que realmente ayuda a Cat y, más que bien, ejerce una buena influencia sobre ella. Además de niñera es una amiga con quien se puede hablar, una confidente, una cómplice.  Con un pasado que duele y una cabezonería tremenda es posible que se cierre a un futuro que quizás esté construido por y para ella.
Junto a Gina tenemos a Annie; a Jim, su marido, y a Daniel; tres buenos amigos, amigos de los de verdad, que te ayudan sin juzgar, sin cuestionar, sin pedir nada a cambio. Daniel es hermano de Jim, marido de Annie, su mejor amiga de la infancia. Es un abogado cuyos servicios le vendrán muy bien a Cat en un momento determinado, una persona con la que se puede hablar y quien en algún momento sabrá tranquilizar a Cat, manejar su genio y su orgullo, despertando por otro lado los celos de un Nathan que si tiene algún otro defecto, además del orgullo, es el ser extremadamente celoso.  Otro personaje con un   pasado propio que para nada le está condicionando, un pasado que él mismo nos cuenta en un momento determinado del libro, un momento muy bonito si se me permite decirlo. Un personaje destinado a llevarse bien con Cat porque ambos comparten algo tan elemental que son capaces de entenderse el uno al otro.
Annie es su amiga de la infancia; alguien que, junto a su marido, la ayuda, la apoya de tal modo que son personajes del entorno totalmente beneficiosos para ella, del mismo modo que lo es David. Ambas tienen un pasado en común y se están labrando un presente, algo que compartir y por lo que luchar.
Por último, me toca hablar de John. ¿Qué decir de este personaje que no suponga una revelación sobre lo que va a ocurrir o dejar de ocurrir en la historia? Es un antiguo amigo de Cat y es posible que pretenda tener con ella más que una simple amistad, ¿o puede que no? Su actitud, su manera de proceder pondrá en jaque a la pareja en alguna que otra ocasión, provocando en Nathan unos celos tremendos que le harán hacer o decir cosas de las que luego puede llegar a arrepentirse.
Da la impresión de que siempre estuvo enamorado de Cat, aunque esta nunca se fijó en él nada más que para considerarlo un buen amigo. Es otro de los personajes que al principio se cree con todo el derecho de juzgar y criticar los actos de los demás o las decisiones tomadas, y conforme vamos acercándonos al final del libro es posible que tenga la llave que abra o cierre para siempre la relación entre Cat y Nathan.  ¿Qué será lo que sucederá?,  ¿cuál será esa llave?
         Hablemos por último de George, el padre de Cat, un hombre temperamental y equivocado que poco a poco va sufriendo una evolución importante en la historia, evolución que tendréis que averiguar por vosotras mismas. Por otro lado, es otro personaje más dispuesto a poner todas las trabas del mundo a la pareja.








Ha llegado el turno de hablar de los antagonistas de la historia, personajes que si ya leísteis el relato corto de Bea Melworren, sabréis de qué pie cojean y sabréis también en qué momento de sus vidas se cierra ese relato, pero ¿qué papel juegan María, Riley y Eleanor en esta historia? ¿Quién es Riley en la vida de Cat? ¿Qué significó para ella en un momento determinado? ¿Vienen estos personajes antagonistas para enredar la trama, o desenredar? ¿Para bien o para mal? ¿Llegan para introducir el misterio, el suspense, la acción o la intriga dando un giro inesperado a la historia? ¿O simplemente salen a cumplir su papel en la misma? No os voy a hablar más de estos personajes para no desvelar algo importante de la historia, porque son personajes que si ya los descubristeis en el relato corto de la autora, ahora tenéis que redescubrirlos vosotras mismas… otra vez. Os aseguro que os sorprenderán porque la autora se crece, se supera a sí misma a la hora de crear personajes antagonistas, malos, malvados… o simplemente oscuros. Os puedo asegurar que son personajes que dan mucho juego, mucho que hablar y cuya historia, que forma parte tanto del pasado de Nathan como del de Cat, es tremenda, terrible, algo que por muchas conjeturas que os hagáis no podréis llegar a imaginar hasta que ellos mismos no lo desvelen.
Una cosa es cierta, quien se haya leído María. La perdición de Nathan Bowen y sabe cómo acaba este relato se habrá hecho mil y una conjeturas sobre lo que va o no a suceder. Bueno, pues solo deciros que os vais a sorprender…, que nada de lo que hayáis pensado os prepara para la cruel verdad.
Dignos de mencionar aparte, pues no forman parte del relato de María, son Ryan y Jenna. Compañeros de instituto de Cat,  y ya en el pasado algo ocurrió entre los tres que traumatizó sobremanera a una Cat que por aquel entonces era una chiquilla ingenua y enamoradiza. Ryan no sale mucho en la historia, pero se debe mencionar por esta razón, porque lo que fuese que pasó entre ellos está condicionando a una Cat que todavía no ha superado ese horrible suceso. Digo que no sale mucho, pero el caso es que cuando sale… Jenna, sin embargo, sí aparece, como la directora del colegio a donde Cat pretende llevar a Carlie. ¿Qué sucederá entre ellas? ¿El pasado que tienen juntas condicionará su presente, o habrán pasado página?
         Por ultimo solo me queda hablar de dos personajes que salen muy poquito en la trama, están ahí porque tienen una función que cumplir, un papel, pero hay que mencionarlos porque esa función, ese papel puede llegar a ser crucial en el desarrollo de la trama. Me refiero a Susan, que parece tener una clave que desvela un misterio, algo muy característico de esta autora: crear suspense, intriga. También hay que mencionar en este apartado a una joven camarera que se arriesga…que ayuda, que en un momento dado se convierte en una especie de tabla de salvación. No me quiero olvidar de Gina cuya misión en la historia parece ser poner de los nervios a Cat…¿Qué razones tendrá?
Un sello indiscutible de la manera de escribir de Bea Melworren es que no escribe una historia de amor sin más. Ella introduce otra serie de elementos que convierten a este libro en una especie de thriller en donde la línea que separa lo legal de lo ilegal a veces no está muy bien definida, en donde la traición, el engaño, la venganza… están muy presentes a lo largo del mismo. Una historia con una serie de giros tan inesperados que una no sabe qué puede pasar de un segundo para el siguiente. Una historia con una trama central muy bien definida, pero no exenta de otras pequeñas…, o no tan pequeñas, historias o tramas que envuelven a los personajes que podríamos considerar secundarios, pero que forman un todo junto a nuestros protagonistas.
Como he dicho antes, esta autora es una artista del misterio y de la intriga, así como de crear personajes antagonistas que dan mucho juego en la trama, pero otra seña de identidad de Bea Melworren es la magnífica portada que ya nos prepara para lo que hay dentro, pues es una imagen que sugiere, que llama la atención… que enamora. Lejos de ser la clásica foto de dos amantes o un paisaje idílico, aquí la autora nos muestra una portada diferente con un cierto toque de tristeza, soledad y abandono en esa muñeca sucia colocada encima de un sillón, o esa pared desconchada. Una portada original, distinta, muy fresca y que, sobre todo, causa en el lector unas enormes ganas de leer.
En resumidas cuentas, recomiendo la lectura de este libro no solo por su trama ágil y distinta, sino también por la manera que tiene la autora de narrar, de conectar con el lector, provocando en él toda una serie de emociones y sentimientos encontrados; de reacciones diversas en tal o cual momento. Pero sobre todo, la recomiendo por un trabajo impecable, bien cuidado y muy, muy bien hecho.
Cuando consigas… hablarme… una historia que dará mucho que hablar… ¿No queréis ser las primeras en saber qué misterios se esconden detrás de sus páginas.
¿Quién es la persona que tiene que conseguir hablar?
¿Por qué no lo hace?
¿Qué mentira es peor: la que se dice o la verdad que se oculta?
¿Cuál es el peor modo de mentir: ocultar a alguien una verdad o un hecho, o decir sin más una mentira?









SOBRE LA AUTORA:

Bea Melworren, seudónimo que la autora escogió para moverse en este difícil mundo, es una joven santanderina simpática y amante del misterio y las tramas enrevesadas, ya lo comprobareis por vosotras mismas.
         Desde pequeña soñó con publicar sus historias y tanto con esta que reseño ahora, Cuando Consigas…hablarme, como   María. La perdición de Nathan Bowen empieza una trayectoria que estoy segura que será larga y fructífera. De hecho, sé de buena tinta que tiene otros proyectos en marcha.
Casada y madre de una pequeña y preciosa niña escribe en sus ratos libres, que muchas veces son menos de los que ella quisiera.
Si queréis tener más detalles e información sobre ella, la podréis encontrar en su página de autora en https://www.facebook.com/Bea-Melworren-402094016667199/en donde la autora tiene anunciado un fabuloso sorteo de un ebook; también por twitter https://twitter.com/BeaMelworren  y en su página web,  beamelworren.wordpress.com  






2 comentarios:

  1. Mil gracias por esta magnífica reseña, sólo tú podías desgranar con tal maestría esta historia y a tus personajes.
    Mil besos y nos seguimos leyendo.

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    1. Mi querida Bea, solo tu podrías escribir una historia tan magnifica,solo así se puede escribir una reseña, cuando la historia que cuenta el autor es tan buena que provoca en ti mil y un sentimientos.
      Muchos besos

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